José Luis Soberanes, presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), sostuvo que no se pueden desatender casos demostrados de faltas graves que ameritan sanción y una firme voluntad correctiva de elementos de las fuerzas armadas.
Al presentar su informe anual y último de su gestión al frente de la CNDH a los miembros del Consejo Consultivo de esa Comisión, Soberanes reiteró que aún es largo el camino de los derechos humanos y en México son casi innumerables los rezagos y las tareas pendientes.
En tal sentido, continuó, la inseguridad pública originada por los desbordamientos del crimen organizado continua siendo expresión de nuestras peores realidades.
Al respecto, subrayó que la participación del Ejército en tareas policiales es tan indispensable como delicada en sus implicaciones, por ello debe ser temporal.
En el acto efectuado en el Auditorio Jaime Torres Bodet del Museo de Antropología, José Luis Soberanes insistió: "en materia de participación de personal de las fuerzas armadas en operaciones de seguridad pública... bajo ningún fundamento ni razón puede calificarse que nuestros soldados sean genocidas o torturadores o que incumplan sistemáticamente los derechos humanos, pero tampoco podemos obviar o desatender casos demostrados de fallas graves que ameritan sanción y una firme voluntad correctiva".
Por otro lado, Soberanes precisó que en los últimos diez años y hasta junio de 2009 se han atendido 43 mil 688 quejas por presuntas violaciones a la garantías individuales.
Mencionó que la CNDH ha logrado que se resuelvan mediante la conciliación entre autoridades y quejosos 3 mil 617 casos.
Paralelamente, indicó, se han emitido 529 recomendaciones a las autoridades, algunas por casos de extrema gravedad como son aquellos cuya sola mención traer a la memoria pública etapas o situaciones que se quisieran ver superadas.
José Luis Soberanes, agradeció el trabajo de los miembros del Consejo Consultivo y de los servidores públicos de esa Comisión Nacional.
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