Tecladista de Guns N’ Roses degusta chocolates en México

Ayer se llevó a cabo en el Hotel W de la ciudad de México una cata de chocolates cien por ciento mexicanos, la cual dio el banderazo para la expo The chocolate experience, que se llevará a cabo del 23 al 25 de enero en el WTC de este país.

El invitado especial en esta experiencia fue el tecladista de Guns N’ Roses, Dizzy Reed, quien se confesó un adicto al chocolate ya que degustó uno con tamarindo, de jamaica, de mole, de chicle, y dos con 95 por ciento de cacao y forma también del fruto.

“Creo que si todos comieran chocolate el mundo sería un lugar mejor, siempre he estado enamorado de la cultura mexicana y su historia, así que México y chocolate es la combinación perfecta”, declaró el músico.

Durante la presentación de esta feria, Reed interpretó uno de los temas clásicos de la banda que marcó a generaciones enteras: “Don’t cry”.

También respondió a preguntas de la prensa sobre las críticas a la última producción de Guns, Chinese Democracy, editada en el año 2008. “No todos los que nos escuchan nos aman, no le podemos gustar a todo el mundo”.

Ante la interrogativa de los rumores sobre el reencuentro de los miembros originales de la banda, el artista negó que tengan planes de una gira, “varios de los miembros de mi grupo ya ni se hablan, así que no hay posibilidad alguna”. Asimismo, confesó que está preparando un disco como solista, pero no adelantó detalles.

UNA FERIA DULCE. La expo reunirá a las principales marcas internacionales de chocolates, que mostrarán variedades de la golosina nunca antes vistas, masajes, baños y ropa realizada con dulce de cacao.

También habrá catas, talleres de cocina con chefs, como Paulina Abascal y José Ramón Castillo, espectáculos, charlas de expertos en nutrición y científicos, y una exposición de pintura y escultura hecha con chocolate.

La representante de Lindt en México, Ana García, declaró que “México es uno de los países fuertes de donde procede el cacao, y también es uno de los que menos consumen chocolate; 500 gramos al año por persona frente a los 11 kilos que se consumen en Suiza”.